Autor: “Néstor Kohan”

Gramsci y Marx. Hegemonía y poder en la teoría marxista

Agotadas y devaluadas todas las formas del antiguo catastrofismo determinista, el socialismo que viene, el del siglo XXI, deberá por fin retomar y reactualizar la dimensión crítica del fetichismo (no sólo de la mercancía y el mercado, sino también del capital, del poder, de la política y del Estado) legada tanto por la herencia de Marx como por la de Gramsci. Allí residirá la única posibilidad de poder luchar eficazmente, en el siglo XXI, contra el poder y la hegemonía burguesa reproducidos mundialmente en escala cada vez más ampliada por los nuevos medios de (des)información.

¿Foquismo? (A propósito de Mario Roberto Santucho y el pensamiento político de la tradición guevarista)

Hay compañeros que, aunque ya no están, siguen presentes. Recordarlos no es sólo hacer memoria. Es, también, una manera de marcar una continuidad histórica. Recuperar sus luchas resulta imprescindible para no permitir que nos fracturen y nos quiebren en nuestra subjetividad. Para que cada nueva generación no tenga que comenzar de cero, desconcertada, arrodillada y mirando sumisamente el suelo, sino de pie y apoyada en las experiencias y los hombros de las generaciones que nos precedieron.

Desafíos actuales de la teoría crítica frente al posmodernismo

Actualmente, a pocos años de haber comenzado el nuevo siglo y el nuevo milenio, se suceden distintas experiencias de lucha, enfrentamiento y rebeldía contra el llamado “nuevo orden mundial”. Desde las movilizaciones masivas y globales contra la guerra imperialista (en Irak y Afganistán) hasta el rechazo de la intromisión norteamericana en diversos países latinoamericanos (como en Venezuela, Cuba, Colombia, etc).

Carta a las queridas Madres de plaza de mayo

Boedo, Buenos Aires, 18 de junio de 2007. Comencé a participar en las marchas de las madres de plaza de mayo en el año 1982, cuando todavía estaban los militares en el poder (yo arañaba la mitad de la escuela secundaria). Además de la hoy ya tradicional consigna de “Ahora, ahora, resulta indispensable, APARICIÓN CON VIDA y castigo a los culpables” recuerdo otro cantito popular de aquellas marchas: “Milicos, muy mal paridos, ¿qué es lo que han hecho con los desaparecidos? La deuda externa… la corrupción… son la peor mierda que ha tenido la nación. ¿Qué pasó con las Malvinas? Que esos chicos ya no están… ¡No debemos olvidarlos… y por eso hay que luchar!”. Acordarme de esas marchas me sigue emocionando y erizando la piel.

Guía de preguntas introductorias para la discusión, el estudio y el debate

El siguiente material constituye una invitación abierta que tiene por objetivo prioritario la interrogación y el debate sobre algunos de los problemas centrales de la sociedad capitalista contemporánea y el modo en que el pensamiento marxista permite abordarlos. La concebimos como una herramienta introductoria destinada a la formación política de la nueva militancia social, anticapitalista y antiimperialista. En sus trazos ideológicos esenciales apunta a superar tanto el populismo como el academicismo, dos tentaciones recurrentes e igualmente nocivas para el pensamiento marxista que pretende ser revolucionario y radical.

Crisis orgánica y revolución pasiva en el capitalismo periférico

Desde Marx y Engels hasta Lenin, Trotsky y Mao, desde Mariátegui, Mella, Recabarren y Ponce hasta el Che Guevara y Fidel, gran parte de las reflexiones de los marxistas sobre la lucha de clases han girado en torno a la necesidad de asumir la iniciativa política por parte de los trabajadores y el pueblo. Pero ¿qué sucede cuando la iniciativa la toman nuestros enemigos? ¿Qué hacer cuando los segmentos más lúcidos de la burguesía intentan resolver la crisis orgánica de hegemonía, legitimidad política y gobernabilidad apelando a discursos y simbología “progresistas”, poniéndose a la cabeza de los cambios para desarmar, dividir, neutralizar y finalmente cooptar o demonizar a los sectores populares más intransigentes y radicales?

¿Ética y/o economía política? en los Apuntes críticos del Che Guevara

¿Ética romántica contra el marxismo? En la historia del socialismo mundial pocos revolucionarios han sido tan admirados y queridos como el Che Guevara. Hasta en el último rincón del mundo su figura es convocada para acompañar las rebeldías más diversas. No obstante este atractivo, creciente año tras año, el Che ha generado al mismo tiempo desprecios, odios, sospechas y condenas. No sólo entre sus enemigos históricos —el imperialismo norteamericano y las burguesías locales de América Latina— sino también en las propias filas del movimiento socialista.

Marx en su (Tercer) Mundo. Hacia un socialismo no colonizado

[Libro completo] Originariamente, este libro nació a fines de 1993. Más precisamente, al regresar de un viaje a Santiago de Chile. Allí habíamos discutido e intercambiado opiniones con compañeros revolucionarios que seguían creyendo, a pesar de todo, en la filosofía del marxismo tal como la formulaban los manuales soviéticos más clásicos y ortodoxos de la época de Stalin. Compañeros que, en lo personal, eran —y deben seguir siendo, aunque nunca más los vi— grandes luchadores y grandes opositores a la dictadura de Pinochet y de sus aliados “democráticos”. Uno de ellos había estado preso en tiempos de la dictadura.

El Capital. Historia y método — Una introducción —

[Libro completo] Luego de sufrir años de neoliberalismo y una monarquía absoluta, donde el Mercado y el Capital se habían autoproclamado reyes eternos del género humano, el viento social que mueve las ideas comienza a cambiar de dirección. ¿Dónde quedó Fukuyama y su supuesto “fin de la historia”? ¿Alguien se acuerda hoy del tristemente célebre “no hay alternativa” de Margaret Thatcher? Actualmente, se viven tiempos distintos. De esperanza y de búsqueda.

Ni calco ni copia. Ensayos sobre el marxismo argentino y latinoamericano

[Libro completo] ¿Por qué escribir sobre el marxismo argentino y latinoamericano? ¿Por qué no decir, mejor, “el marxismo en Argentina y en América Latina”? ¿No resulta demasiado atrevido tomar la palabra y pretender situar al marxismo como parte medular de nuestra propia cultura política? Durante demasiado tiempo nos enseñaron a escuchar, tomar nota y repetir mecánicamente. Nos educaron en el calco y la copia. No podíamos hablar con nuestro propio lenguaje. Estábamos inhabilitados para pensar con cabeza propia. La historia nos reservaba un lugar, sí, pero como objetos pasivos, no como sujetos activos y creadores.